
Fablabs, hackerspaces, makerspaces… En muchas ciudades comenzamos a encontrar espacios donde la gente experimenta nuevas formas de producir objetos, ya sean juegos, muebles, paneles solares e, incluso, vehículos o viviendas, utilizando las tecnologías de fabricación digital y, especialmente, la impresión 3D.
El gran cambio de esta nueva forma de producción no está sólo en la tecnología, sino en una serie de principios, valores y normas que no responden a los sistemas tradicionales de producción. En estos espacios, la ciudadanía se reúne para hacer cosas juntos, para aprender de forma colaborativa, compartiendo el conocimiento en todo momento en internet.
Así se está configurando un ecosistema totalmente interrelacionado y donde en un espacio se crea un objeto, en otro se mejora el mismo objeto, y en un tercero se descubre un uso nuevo para ese mismo objeto. Hablamos de, en estos momentos, más de 400 makerspaces y 200 fablabs en 40 países, y la cifra crece mes a mes.
¿Cómo pueden contribuir estos espacios y estas nuevas formas de producción creativa e inclusiva al desarrollo sostenible?

Adrian Smith, investigador en grassroots innovations en el Centro STEPS de la Universidad de Sussex, en el Reino Unido, tratará este tema en la próxima sesión del itdUPM del 17 de noviembre. Además, al día siguiente, participará en la ruta de innovación y cultura maker que organizamos en Madrid.
Cuándo: 17 de noviembre a las 16:00 horas
Dónde: ETSI Agrónomos de la UPM de Madrid. Edificios Centrales. Aulario nuevo – Aula B24. Ver mapa